Por Sophia L. Thomas, DNP, FNP-BC, PPCNP-BC, FNAP, FAANP (Enfermera Practicante)
Marzo es el Mes Nacional del Riñón, cuando creamos conciencia sobre la enfermedad renal crónica (ERC). Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que más de uno de cada siete adultos, es decir, el 15% de todos los adultos de Estados Unidos, tienen ERC. Eso equivale aproximadamente a 37 millones de personas.
Aproximadamente el 48% de las personas con función renal reducida ni siquiera saben que tienen ERC, y cada 24 horas, alrededor de 340 personas comienzan una terapia de diálisis para tratar su enfermedad. Esta enfermedad también implica un costo elevado para el sistema de atención sanitaria de EUA, con un total de más de $87 mil millones para los beneficiarios de Medicare solo en 2017.
Los riñones son dos órganos con forma de frijol ubicados a cada lado de la parte inferior de la columna que tienen aproximadamente el tamaño de un mouse de computadora. Aunque son pequeños, estos órganos son vitales para su salud en general, ya que eliminan toxinas, regulan la presión arterial y las sustancias químicas de la sangre y mantienen los huesos sanos. Filtran el exceso de agua y los desechos de la sangre de su cuerpo para producir orina. Los riñones también equilibran las sales y minerales, como calcio, sodio y potasio, que circulan dentro del cuerpo.
La ERC es una enfermedad en la que se dañan uno o ambos riñones, lo que afecta el filtrado adecuado de la sangre y los líquidos del cuerpo. Con el tiempo, la ERC puede causar insuficiencia renal, lo que requiere un tratamiento de diálisis o un trasplante de riñón. El exceso de líquido y los desechos que quedan en el cuerpo también pueden causar otros problemas, como enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
La ERC también puede tener otras consecuencias graves para la salud:
La ERC es una enfermedad en la que se dañan uno o ambos riñones, lo que afecta el filtrado adecuado de la sangre y los líquidos del cuerpo. Con el tiempo, la ERC puede causar insuficiencia renal, lo que requiere un tratamiento con diálisis o un trasplante de riñón. El exceso de líquido y los desechos que quedan en el cuerpo también pueden causar otros problemas, como enfermedades cardíacas o derrame cerebral.
La ERC también puede tener otras consecuencias graves para la salud:
- Anemia.
- Susceptibilidad incrementada a infecciones.
- Pérdida de apetito.
- Depresión y baja calidad de vida.
Varios factores hacen que una persona sea más propensa a desarrollar ERC:
- Diabetes. La diabetes es la principal causa de ERC. La glucosa elevada en sangre de esta enfermedad puede dañar los vasos sanguíneos de los riñones. Casi una de cada tres personas con diabetes tiene ERC.
- Cardiopatía. Las personas que tienen una enfermedad cardíaca tienen un mayor riesgo de desarrollar ERC y viceversa. Los investigadores están trabajando para comprender mejor esta relación entre las dos enfermedades, pero existe un vínculo evidente.
- Hipertensión arterial. La hipertensión arterial es la segunda causa principal de ERC. La hipertensión arterial también puede dañar los vasos sanguíneos de los riñones. Casi uno de cada cinco adultos con hipertensión arterial tiene ERC.
- Antecedente familiar de insuficiencia renal. Si algún miembro de su familia inmediata tiene insuficiencia renal, usted corre el riesgo de sufrir ERC, ya que esta enfermedad tiende a ser hereditaria. Si le diagnostican ERC, recomiende a los miembros de su familia a hacerse la prueba.
- Ascendencia afroamericana, hispana o india americana. Estas tres comunidades tienen un riesgo más alto de ERC debido a tasas más altas de diabetes e hipertensión arterial.
Los riñones son partes del cuerpo increíblemente resistentes que a menudo pueden seguir funcionando a un ritmo lo suficientemente alto como para que se sienta bien, a pesar de la aparición de la ERC. Esta ausencia de síntomas puede hacer que la ERC sea increíblemente difícil de diagnosticar en etapas tempranas. Por lo general, no es hasta que la ERC se ha vuelto más avanzada que los síntomas comienzan a manifestarse. Para muchas personas, la única forma de saber que tienen ERC es mediante un análisis de sangre u orina realizado por un proveedor de atención médica, como un enfermero especializado.
Asegúrese de hablar con su proveedor de atención sanitaria si se encuentra en uno de los grupos de riesgo mencionados anteriormente o si desarrolla alguno de estos síntomas de ERC avanzada:
- Dolor en el pecho.
- Piel seca.
- Dolores de cabeza
- Calambres musculares.
- Náusea.
- Dificultad para respirar.
- Problemas para dormir.
- Vómitos
- Pérdida de peso.
- Pérdida de concentración.
- Aumento o disminución de la micción.
Con casi 37 millones de adultos en los EUA que viven con ERC, esta es una enfermedad que debemos tomar en serio. Este Mes nacional del riñón, programe una cita con su proveedor de atención sanitaria para que le revisen los riñones.